Lipedema
El lipedema es una enfermedad crónica que provoca la acumulación anormal de grasa en piernas y brazos, generando dolor, inflamación y una desproporción corporal difícil de corregir con dieta o ejercicio. Hoy en día, el único tratamiento eficaz para abordar el lipedema de manera definitiva es la cirugía plástica mediante liposucción especializada, realizada con técnicas seguras y respetuosas con el sistema linfático.
Lipedema
El lipedema es una enfermedad crónica que provoca la acumulación anormal de grasa en piernas y brazos, generando dolor, inflamación y una desproporción corporal difícil de corregir con dieta o ejercicio. Hoy en día, el único tratamiento eficaz para abordar el lipedema de manera definitiva es la cirugía plástica mediante liposucción especializada, realizada con técnicas seguras y respetuosas con el sistema linfático.
Lipedema
El lipedema es una enfermedad crónica que provoca la acumulación anormal de grasa en piernas y brazos, generando dolor, inflamación y una desproporción corporal difícil de corregir con dieta o ejercicio. Hoy en día, el único tratamiento eficaz para abordar el lipedema de manera definitiva es la cirugía plástica mediante liposucción especializada, realizada con técnicas seguras y respetuosas con el sistema linfático.
Procedimiento
Procedimiento
Procedimiento
El procedimiento quirúrgico más efectivo es la liposucción tumescente o asistida por agua (WAL), diseñada para eliminar el tejido graso enfermo sin dañar vasos linfáticos ni estructuras sanas.
Se realiza con cánulas específicas, más finas y delicadas, que permiten remodelar las extremidades, aliviar síntomas como el dolor y la pesadez, y devolver armonía al contorno corporal. Dependiendo del grado de lipedema, pueden ser necesarias varias sesiones para tratar completamente las zonas afectadas.
La cirugía se lleva a cabo con anestesia general o epidural, según la extensión, y suele durar entre 2 y 4 horas.
El procedimiento quirúrgico más efectivo es la liposucción tumescente o asistida por agua (WAL), diseñada para eliminar el tejido graso enfermo sin dañar vasos linfáticos ni estructuras sanas.
Se realiza con cánulas específicas, más finas y delicadas, que permiten remodelar las extremidades, aliviar síntomas como el dolor y la pesadez, y devolver armonía al contorno corporal. Dependiendo del grado de lipedema, pueden ser necesarias varias sesiones para tratar completamente las zonas afectadas.
La cirugía se lleva a cabo con anestesia general o epidural, según la extensión, y suele durar entre 2 y 4 horas.
El procedimiento quirúrgico más efectivo es la liposucción tumescente o asistida por agua (WAL), diseñada para eliminar el tejido graso enfermo sin dañar vasos linfáticos ni estructuras sanas.
Se realiza con cánulas específicas, más finas y delicadas, que permiten remodelar las extremidades, aliviar síntomas como el dolor y la pesadez, y devolver armonía al contorno corporal. Dependiendo del grado de lipedema, pueden ser necesarias varias sesiones para tratar completamente las zonas afectadas.
La cirugía se lleva a cabo con anestesia general o epidural, según la extensión, y suele durar entre 2 y 4 horas.
Información
- Mujeres diagnosticadas con lipedema en distintos grados.
- Pacientes con dolor, pesadez, hematomas frecuentes y limitación de movilidad.
- Personas que no han obtenido mejoría con tratamientos conservadores.
- Quienes desean mejorar su calidad de vida y la proporción estética de piernas y brazos.
- Evaluación clínica detallada del estadio del lipedema.
- Pruebas médicas (analíticas, ecografías vasculares si es necesario).
- Recomendación de dejar tabaco y anticoagulantes antes de la cirugía.
- Planificación de las zonas a tratar en una o varias intervenciones.
- Anestesia general o regional, según la extensión.
- Infiltración de una solución tumescente para facilitar la extracción y proteger los tejidos.
- Liposucción con técnica WAL (Water Assisted Liposuction) o microcánulas.
- Eliminación del tejido adiposo enfermo, remodelando piernas y/o brazos.
- Duración: entre 2 y 4 horas por sesión.
- Uso de prendas de compresión médica durante varias semanas.
- Molestias, inflamación y hematomas leves, que ceden con el tiempo.
- Caminar de forma precoz para mejorar la circulación.
- Reincorporación a la vida laboral en 2 a 3 semanas (según el caso).
- Evitar ejercicio intenso hasta la completa recuperación (4-6 semanas).
- Reducción del dolor y la pesadez en las extremidades.
- Mejora de la movilidad y de la calidad de vida.
- Disminución del volumen en piernas y brazos, logrando una silueta más proporcionada.
- Resultados estéticos y funcionales duraderos.
- Mejoría visible desde los primeros días, con evolución progresiva en semanas.
- Reducción significativa de la grasa enferma y de los síntomas asociados.
- Resultados permanentes, aunque el seguimiento médico y el estilo de vida saludable son clave.
- El lipedema es crónico: la cirugía elimina la grasa enferma, pero requiere seguimiento a largo plazo.
- Es fundamental que el procedimiento lo realice un cirujano plástico especializado en lipedema, con experiencia en técnicas de preservación linfática.
- La combinación de la cirugía con medidas de compresión y hábitos saludables mejora y mantiene los resultados.
Información
- Mujeres diagnosticadas con lipedema en distintos grados.
- Pacientes con dolor, pesadez, hematomas frecuentes y limitación de movilidad.
- Personas que no han obtenido mejoría con tratamientos conservadores.
- Quienes desean mejorar su calidad de vida y la proporción estética de piernas y brazos.
- Evaluación clínica detallada del estadio del lipedema.
- Pruebas médicas (analíticas, ecografías vasculares si es necesario).
- Recomendación de dejar tabaco y anticoagulantes antes de la cirugía.
- Planificación de las zonas a tratar en una o varias intervenciones.
- Anestesia general o regional, según la extensión.
- Infiltración de una solución tumescente para facilitar la extracción y proteger los tejidos.
- Liposucción con técnica WAL (Water Assisted Liposuction) o microcánulas.
- Eliminación del tejido adiposo enfermo, remodelando piernas y/o brazos.
- Duración: entre 2 y 4 horas por sesión.
- Uso de prendas de compresión médica durante varias semanas.
- Molestias, inflamación y hematomas leves, que ceden con el tiempo.
- Caminar de forma precoz para mejorar la circulación.
- Reincorporación a la vida laboral en 2 a 3 semanas (según el caso).
- Evitar ejercicio intenso hasta la completa recuperación (4-6 semanas).
- Reducción del dolor y la pesadez en las extremidades.
- Mejora de la movilidad y de la calidad de vida.
- Disminución del volumen en piernas y brazos, logrando una silueta más proporcionada.
- Resultados estéticos y funcionales duraderos.
- Mejoría visible desde los primeros días, con evolución progresiva en semanas.
- Reducción significativa de la grasa enferma y de los síntomas asociados.
- Resultados permanentes, aunque el seguimiento médico y el estilo de vida saludable son clave.
- El lipedema es crónico: la cirugía elimina la grasa enferma, pero requiere seguimiento a largo plazo.
- Es fundamental que el procedimiento lo realice un cirujano plástico especializado en lipedema, con experiencia en técnicas de preservación linfática.
- La combinación de la cirugía con medidas de compresión y hábitos saludables mejora y mantiene los resultados.
Información
- Mujeres diagnosticadas con lipedema en distintos grados.
- Pacientes con dolor, pesadez, hematomas frecuentes y limitación de movilidad.
- Personas que no han obtenido mejoría con tratamientos conservadores.
- Quienes desean mejorar su calidad de vida y la proporción estética de piernas y brazos.
- Evaluación clínica detallada del estadio del lipedema.
- Pruebas médicas (analíticas, ecografías vasculares si es necesario).
- Recomendación de dejar tabaco y anticoagulantes antes de la cirugía.
- Planificación de las zonas a tratar en una o varias intervenciones.
- Anestesia general o regional, según la extensión.
- Infiltración de una solución tumescente para facilitar la extracción y proteger los tejidos.
- Liposucción con técnica WAL (Water Assisted Liposuction) o microcánulas.
- Eliminación del tejido adiposo enfermo, remodelando piernas y/o brazos.
- Duración: entre 2 y 4 horas por sesión.
- Uso de prendas de compresión médica durante varias semanas.
- Molestias, inflamación y hematomas leves, que ceden con el tiempo.
- Caminar de forma precoz para mejorar la circulación.
- Reincorporación a la vida laboral en 2 a 3 semanas (según el caso).
- Evitar ejercicio intenso hasta la completa recuperación (4-6 semanas).
- Reducción del dolor y la pesadez en las extremidades.
- Mejora de la movilidad y de la calidad de vida.
- Disminución del volumen en piernas y brazos, logrando una silueta más proporcionada.
- Resultados estéticos y funcionales duraderos.
- Mejoría visible desde los primeros días, con evolución progresiva en semanas.
- Reducción significativa de la grasa enferma y de los síntomas asociados.
- Resultados permanentes, aunque el seguimiento médico y el estilo de vida saludable son clave.
- El lipedema es crónico: la cirugía elimina la grasa enferma, pero requiere seguimiento a largo plazo.
- Es fundamental que el procedimiento lo realice un cirujano plástico especializado en lipedema, con experiencia en técnicas de preservación linfática.
- La combinación de la cirugía con medidas de compresión y hábitos saludables mejora y mantiene los resultados.

